LA VICTORIA. CAFÉ-BAR-RESTAURANT

Cuando el tramo de la madrileña calle de Bravo Murillo, a la altura de Tetuán de las Victorias, llevaba por nombre el de calle de O'Donnell vino a construirse un nuevo edificio en el solar que ocupaban los números 40 y 42 (hoy nº 286). El inmueble se concibió como lugar de esparcimiento para los vecinos de la zona. Fue un bar-café-restaurant, al que posteriormente se le añadiría un cinematógrafo y llevó por nombre el de La Victoria.


Fuente: Fotos antiguas de Madrid - Facebook (1925)
La Victoria, entonces en la calle de O'Donnell (hoy Bravo Murillo), números 40 y 42. 

El nuevo negocio estuvo dotado de tal suerte de adelantos y comodidades que no tenía rival ni entre los mejores de Madrid, decían los socios propietarios de la nueva empresa: Benito Bernaldo de Quirós, Julián Dardé, Antonio García Montoro y Manuel Carretero. Todos ellos constituyeron la Sociedad Regular Colectiva La Victoria, que inauguró su nuevo establecimiento de recreo el día 7 de junio de 1923.

El edificio de una sola altura, proyectado por el arquitecto Luis Herrero, constaba de dos grandes naves unidas por una ancha galería que recorría la fachada principal, además de un gran patio central que distribuía los espacios del interior. El tiempo destinado a su construcción fue de siete meses.

En su fachada, sobre la parte correspondiente a la zona destinada a ser el confortable e higiénico bar, un gran rótulo anunciaba que los desayunos eran servidos hasta las 10 de la mañana y estaban compuestos de tostada y vaso de café con leche al precio de 0,35 céntimos (de peseta). Otros servicios que ofertaba La Victoria, en sus setecientos veinte metros cuadrados de superficie, eran: una sala de billar, un restaurant, el tocador para señoras y sus modernos inodoros.


Fuente: ign.es (1929)
Fragmento de plano parcelario de Tetuán. 
El edificio de La Victoria se situaba frente a la antigua plaza de toros, desaparecida en 1936.

En el año 1923 Tetuán de las Victorias era una barriada dependiente del municipio de Chamartín de la Rosa, que hasta el año 1948 no sería anexionado a Madrid. La carencia de infraestructuras tan necesarias como el alcantarillado, en una zona que aún estaba en proceso de urbanización, propició que La Victoria tuviese que instalar pozos Mouras, de reciente invención y que colocaban en inmejorables condiciones de saneamiento a todo el local.

Un teatro-cine al aire libre, que sería inaugurado durante el verano de 1923, completaba la oferta de ocio de La Victoria. Poco después, el establecimiento vería incrementada su propuesta construyendo un gran cine cubierto, con capacidad para dos mil quinientos espectadores. El recinto sería aprovechado, durante los años 30 del siglo pasado, para diversos actos organizados por el municipio de Chamartín de la Rosa. Mítines, festivales, fiestas infantiles para repartir juguetes y reuniones de gremios laborales se celebraron aquí, contando con la máxima asistencia del vecindario. 


Fuente: hemerotecadigital.bne.es (1923)

Tras la Guerra Civil Española parece que parte del edificio quedó en desuso. En su interior se instaló una pastelería y continuaron en funcionamiento el bar y el café, que acogía a los jugadores de ajedrez y dominó de Tetuán de las Victorias.

El edificio, bastante mermado, se mantuvo hasta los años setenta.


Fuentes:

Fotos Antiguas de Madrid (Facebook)

hemerotecadigital.bne.es

ign.es



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